La ex Fiscal Dra. Gabriela Fossati, actualmente dedicada a la actividad política partidaria, fue entrevistada por CEROESTRES abordando distintos temas, desde lo penal hasta político, y también su decisión de apoyar la candidatura de Laura Raffo como candidata la Presidencia de República. Al comenzar la entrevista haciendo mención a Salto, señalo que los salteños contamos con la Fiscal Gloria Nicolini con quien trabajo y es una excelente compañera.
Gabriela Fossati escribió el libro “La cara oculta del sistema judicial en Uruguay”, donde relata el poder de “la manada” refiriéndose a algunos integrantes de fiscalía, aclarando que en fiscalía hay seiscientos funcionarios, y ella se refiere a sesenta o setenta, por su forma de actuar, y ellos consideran que están en la vereda de enfrente, y se parecen mucho al comportamiento que tienen alguna manada de animales, sobre todo la manda de los lobos, encontrando en la palabra algo muy gráfico para adjetivar a ese grupo de personas que no son todos, ni siquiera mayoría, pero como trabajan en forma mancomunada se imponen frente a la mayoría de la gente que trabaja en la institución.
¿Usted ingresa a Fiscalía con el nuevo CPP?
No, ingresé como Fiscal en el año 1999, con el viejo código del proceso penal, estuve 24 años como fiscal y 6 años como Juez, antes actuaria y secretaria de Juez.
En la ley de violencia de género contra la mujer se plantean diferencia en cuanto cuando el hombre es denunciado tiene inmediatamente medidas cautelares, pero cuando el hombre denuncia a la mujer tiene que probar la agresión. ¿Cuál es su opinión?
La ley de género vino a visibilizar un problema real que había en relación en los vínculos de pareja y algún tratamiento en tema laborales en relación a las mujeres. En cuanto al artículo 3º que es el más cuestionado en cuanto a que, indica que, si hay contradicción entre lo dicho por el hombre y la mujer hay que priorizar lo dicho por la mujer.
Yo tengo una interpretación diferente a lo que dice alguna ONG, vinculada a movimientos feministas, lo que ese artículo quiere señalar, evidentemente, lo que pasa entre cuatro paredes normalmente lo conocen las dos personas y a veces hay niños, entonces el Juez cuando tiene una denuncia tiene que, necesariamente realizar una investigación, ahora, en principio si el hombre dice no es cierta esta denuncia que yo cometí acto de violencia, y la mujer si, la medida más adecuada es empezar por dar por cierto los dichos de la mujer para obtener otros elementos objetivos para trabajarlos generándole el menor perjuicio posible al hombre, creo que se ha llegado al extremo de creer que la mujer siempre tiene razón y el hombre siempre es malo, y no es así.
Delitos de calumnia y simulación
Hay que tener presente también, que cuando la denuncia es falsa y se prueba que es falsa, existe otro delito que es el de calumnia y simulación de delitos, están muy poco utilizados, y debería aplicarse porque la mujer que denuncia de manera falsa al hombre, no solamente le genera daños irreparables sino que también puede generar daños irreparables a los hijos en común. La ley es necesaria porque cuando llega la noticia los fiscales especializados, no tienen tiempo para analizarlos, y necesitan tomar medidas de urgencia para ver qué es lo que está pasando, lamentablemente el principio de la medida que se tiene que tomar es separar para proteger la vida humana en caso de que los dichos de la mujer sean ciertos.
¿Usted está de acuerdo con el Nuevo Código del Proceso Penal?
En un primer momento fui del grupo que entendió que podía ser un avance, la verdad que nos vendieron muy bien el nuevo formato, y luego cuando tome contacto de cómo había sido estructurado me di cuenta que había sido un error, con el diario del lunes, hubiera preferible aggiornar el modelo inquisitivo anterior.
¿Cuanto más acuerdos abreviados más presos tenemos las cárceles llenas?
Pienso que eso parte de la mala estructura que diseño el Dr. Jorge Díaz, en cuanto a que quería numero y no resultado, y no todos los delitos son iguales, la cárcel no es la única solución posible, y muchas veces no es aconsejable ni siquiera es buena, explicarle a la gente que no es bueno ir a la cárcel para alguien que cometió un delito en un supermercado, implica contactarlos con delincuentes más peligrosos, luego salen con deudas y es todo un circulo vicioso, mandarlo a la cárcel en vez de un tratamiento no va ser una solución, el camino más fácil de generar en el imaginario popular de que van estar más protegidos y mandar presos a mayor cantidad de gente. La situación fue creada y generada por el doctor Jorge Díaz, y hoy lo escucho decir que la cárcel está llena de presos pobres y analfabetos, y eso fue la consecuencia de la estructura que él armó, hubo fiscales que fueron trasladados por no satisfacer los números de formalizaciones que él pretendía.
“El numero de presos no hace a la calidad de la Justicia”
Tenemos que hacer entender a la gente que hay delitos y delitos, que hay delincuente y delincuentes, que la mezcla de delincuentes no es a veces la solución, que tratarlos como animales lo único que va a determinar es que luego el ser humano se reinserte a la sociedad en peores condiciones, tenemos que hacerle entender a la gente que el número de presos no va con la calidad de la justicia. La calidad de la justicia va con tratar adecuadamente a cada delincuente, según el delito que cometió y según sus circunstancias.
También existen los acuerdos reparatorios. ¿Se puede decir que el delincuente rico negocia con plata y el pobre con cárcel?
El acuerdo reparatorio en realidad no lo veo mal, es como la privatización de la justicia yo he propuesto a Laura Raffo introducir la querella privada, no es malo privatizar un aspecto del delito porque cuando estamos frente a un delincuente hay dos ámbitos de afectación esta el ámbito privado de la víctima del delito y está el ámbito social publico de las personas que tienen que vivir con esas sensación de miedo que le genera el delito, son dos ámbitos diferentes que a mi juicio debería ser trabajados con el directamente damnificado. Los fiscales deberían atender la afectación pública y el damnificados debería de poder su parte de ofensa y llegar al acuerdo, lo que usted me dice está mal, lo que hacemos es permitir que los ricos realicen acuerdos a través del pago de dinero, y los pobres porque no tienen dinero no le permitimos otra forma de acuerdo reparatorio, ahí hay una disfunción que tenemos que trabajar, tenemos que tratar de tener un sistema igualitario, que valore las diferentes condiciones de las personas afectadas por el sistema.